Corredor Bioceánico y Túnel Agua Negra
Proyecto para impulsar, el turismo, el comercio, la ciencia y mucho más, en el Cono Sur latinoaméricano, al que Ruiz, ha dedicado décadas de estudio y promoción, para lograr la bendita voluntad política que ha faltado, para su concreción.
For Export Vol. 12, Dic. 2023
Corredor Bioceánico y Túnel Agua Negra:
Oportunidad Estratégica para la Integración Regional
El Túnel de Agua Negra, que forma parte del Proyecto Internacional Corredor Bioceánico Central, es un ambicioso proyecto que busca mejorar la conectividad entre Chile y Argentina, facilitando el comercio y el tránsito internacional entre el Océano Pacífico y el Atlántico, desde Chile A Brasil. Este proyecto vial, que prevé la construcción de dos túneles a través de la Cordillera de los Andes, conecta la región chilena de Coquimbo con la provincia argentina de San Juan, proyectando un impacto económico significativo en ambos lados de la frontera y en toda Sudamérica.
La construcción del túnel es clave para potenciar el Corredor Bioceánico, una ruta que unirá el puerto de Coquimbo con el de Porto Alegre, en Brasil. Este corredor se vislumbra como una vía crucial para el transporte de mercancías, lo que generaría importantes beneficios económicos, como la dinamización del comercio exterior y el impulso del turismo, al reducir la estacionalidad y aumentar el flujo de visitantes durante todo el año.
La oraganización CORPAN (Corporación para el Desarrollo y la Integración Paso Agua Negra), de la cual forma parte como director de Asuntos Internacionales, Carlos Ruiz Benítez, ha sido una organización fundamental en la promoción de este proyecto. Ruiz ha sido un fuerte defensor de la implementación del túnel, criticando la falta de avances desde los gobiernos chilenos a través de los años y llamando a acelerar las gestiones. Según Ruiz, la concreción de esta obra no solo mejorará la infraestructura, sino que transformará el futuro económico de la región de Coquimbo, abriendo oportunidades de empleo y desarrollo a través del comercio internacional.
El embajador Viera-Gallo y otros actores internacionales han coincidido en que el proyecto debería ser llevado adelante bajo un sistema de concesión, lo que permitiría una ejecución más rápida y eficiente con financiamiento privado, generando interés entre inversionistas internacionales. Sin embargo, la obra se ha visto afectada por la burocracia y el hipercentralismo chileno, lo que ha ralentizado su progreso.
Pese a estos obstáculos, desde Argentina ya se han dado importantes avances, como la inauguración en 2014 de la Ruta Internacional 150, que conecta el lado argentino del túnel hasta La Rioja, lo que demuestra el compromiso del país vecino con el proyecto binacional. Mientras tanto, en Chile, la falta de pavimentación en algunos tramos del paso de Agua Negra y la paralización de licitaciones han frenado el progreso, situación que Ruiz califica como un desconocimiento de las autoridades chilenas sobre el impacto estratégico del corredor.
El Corredor Bioceánico no solo potenciará el comercio y el turismo, sino que también representa una respuesta ante las crisis globales de transporte, como los colapsos del Canal de Panamá y el Canal de Suez. En un escenario internacional marcado por la incertidumbre, este proyecto abre una ventana de oportunidad para que el Cono Sur de América Latina se integre de manera más efectiva a las rutas comerciales mundiales.
El desafío ahora es asegurar la voluntad política y el financiamiento necesario para llevar adelante la obra. CORPAN, bajo el liderazgo de Carlos Ruiz, continuará promoviendo la cooperación binacional y la participación de actores clave para que este anhelado proyecto finalmente se concrete, contribuyendo al desarrollo sostenible y a la mejora de la calidad de vida en la región de Coquimbo y más allá.